Esta es una de esas recetas de siempre, de las que no fallan, además es tan tan sencilla que hasta nos la podemos saber de memoria.
Una receta de las de nuestras abuelas.
En este caso la he hecho con manzana, porque la verdad que las recetas con manzana me encantan, le dan un extra de jugosidad buenísimo.
¡Vamos a ello!
INGREDIENTES
- 200G de azúcar + decoración
- 4 huevos L
- 200G de aceite de girasol
- 200G de harina de repostería
- 3 manzanas Golden
- 1 sobre de levadura Royal
- 1 pizca de sal
PROCESO
- Ponemos los huevos en un bol, y añadimos el azúcar, vamos batiendo con las varillas hasta que monten los huevos y se cree una mezcla cremosa.
- Incorporamos el aceite de girasol.
- Vamos pelando las manzanas, y las cortamos: una manzana la reservamos para la decoración de la parte superior del bizcocho. Las meteremos en agua para que no se oxiden.
- Tamizamos la harina y la vamos incorporando a la masa poco a poco, junto a la sal y la levadura.
- Vamos a incorporar la harina en la masa mediante movimientos con la espátula, una vez que no queden restos, dejaremos de incorporar para no desarrollar el gluten de la harina.
- Ponemos el horno a calentar a 180ºC.
- Incorporamos la manzana a la masa con movimientos envolventes, creando una mezcla uniforme.
- Cogemos el spray anti desmoldante y rociamos todo nuestro molde, repartimos con un pincel de cocina.
- Cogemos la manzana que habíamos reservado para la decoración, la ponemos sobre el molde y ponemos un poquito de azúcar.
- Vertemos la mezcla en el molde y llevamos a hornear durante 45 minutos aproximadamente.
- Pinchamos el bizcocho para comprobar que está bien hecho, sacamos y dejamos enfriar en una rejilla.
- Cuando el bizcocho esté templado desmoldamos.
¿Qué os ha parecido?
¡No os la perdáis!
